lunes, 21 de mayo de 2012

Diana Hernández González 2ºA. LA OBESIDAD.

Con el paso de los años, el número de personas con sobrepeso ha aumentado notablemente en los países desarrollados. Las personas parecen no darse cuenta de lo insano que puede llegar a ser el peso excesivo y por ello, el porcentaje en obesidad ha aumentado mucho en los últimos años.
   En la mayoría de los casos, este estilo de vida se adopta desde la infancia. El principal motivo, es la mala alimentación. En el último siglo el mercado se ha ido llenando cada vez más de alimentos con exceso de grasas, azúcares e hidratos de carbono perjudiciales, que han ido reemplazando poco a poco alimentos saludables e indispensables tales como frutas y verduras. 
   Si además de adoptar unos malos hábitos alimenticios no se practica el deporte, el caso empeora. ¿Quién va a motivar a un niño a hacer ejercicio, si ni su propia familia lo hace?
   El ejercicio físico ayuda a estar más en forma, a aumentar la circulación cerebral y a fortalecer el sistema osteomuscular.
   Por otra parte, en algunos casos que se han hecho públicos, ya en personas adolescentes y adultas los problemas de peso están relacionados con drogas, depresión y ansiedad. 
   Un buen ejemplo puede ser el de un fumador o alcohólico que decide o le obligan a dejarlo; es tanta la ansiedad que le provoca no consumir, que se refugia en la comida.
   Para terminar, cabe destacar la imagen. Aunque no parezca un rasgo importante, nuestro aspecto físico es algo con lo que todos nos deberíamos sentir a gusto y felices.
   Gran parte de las personas que tienen problemas de peso no se sienten bien consigo mismas. Pudiendo llevar una vida sana y tener unas buenas condiciones físicas, ¿por qué olvidarse de uno mismo con el paso de los años?
   Se habla de enfermedades crónicas como cáncer y sida; son temidas, nadie quiere padecerlas. Pero, ¿acaso no es la obesidad una enfermedad peligrosa y duradera, si no se  hace nada por evitarla o remediarla?