Era un suspiro largo y sonoro
la brisa del mar aquella noche…
La noche no queriendo despedirse
del bonito color plata de la luna llena.
El mar alzó potente y la luna
hundió en las olas la plateada frente
en una oscuridad profunda desecha.
Para mi pobre corazón dolorido
Para mi triste alma golpeada
Para mi corazón herido.
Para mi amarga vida fatigada
la noche amada y luna deseada
el mar, la luna y no dejar de pensar en ello.
1 comentario:
He hecho unos pequeños cambios en los versos. Nota: 9
Publicar un comentario