la voz del viento aquella mañana.
El día feliz por volver,
desprendía preciosos resplandores
que podían dar vida hasta a una roca.
Y la luna, celosa de su belleza,
intentaba con su oscuridad apagarlo,
pero él estaba muy feliz,
y hasta agazapándose delante
su luz llegaba al cielo.
1 comentario:
Hermoso poema. Nota 8
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